Artículo publicado en el espacio de la Hermandad del Stmo. Cristo del Perdón y Mª Stma. de la Humildad en la revista de Semana Santa "El Monte" nº 9, 2009.
Ya han transcurrido once años desde que allá por el año 1998 me desplacé a la vecina localidad de Albatera para reunirme con el escultor Valentín García Quinto para encomendarle la creación de una imagen de Virgen para que saliera en la Semana Santa de Aspe.
Nunca pude imaginar los acontecimientos que me ha tocado vivir a título personal desde ese día. Durante todos estos años, han pasado momentos buenos y momentos malos; de todos ellos he aprendido, pero sobre todo, que con humildad y honestidad en esta vida todo se acaba consiguiendo. Atrás han quedado las bendiciones de la Virgen. La primera fue el 13 de junio del año 1999 en la hoy llamada Basílica Ntra. Sra. del Socorro, bajo el nombre de Nuestra Señora de la Amargura; y con el que procesionó durante los dos años siguientes en nuestra Semana Santa. Aún a día de hoy sigo sin entender el porqué se tuvo que llevar a cabo la segunda bendición, pero esa era la condición indispensable que tenía que darse para que la imagen de la Virgen pudiera volver a participar en nuestra Semana Santa.
El día 2 de abril del año 2006, y en la parroquia de El Buen Pastor, se volvió a bendecir la imagen de la Virgen y que desde ese mismo día pasó a llamarse Mª Stma. de la Humildad; y junto a ella, la bendición también de la imagen que representa la figura del Redentor bajo la advocación del Santísimo Cristo del Perdón.
Desde aquel ya lejano Viernes Santo de 2001 trabajé junto a un grupo de gente para la fundación de la Hermandad; y tras la nueva bendición, se consiguió el 11 de julio de 2006 el que nuestra Hermandad fuera fundada al ser aprobada para incorporarse a la Semana Santa de Aspe.
El Miércoles Santo de 2007, 4 de abril, la Virgen volvía a estar en la Plaza Mayor, junto a la puerta de la Basílica, como si no hubiera pasado el tiempo para ella, aunque tuviera otra advocación y, esta vez su propia Hermandad. Sin embargo, aunque parecía un día de regreso, lo era de despedida. Despedida porque era la última vez que nuestra Semana Santa la veía así. En 2008 se sumó la imagen del Santísimo Cristo de la Bondad, y este año se incorpora la de San Juan Evangelista para finalizar su conjunto escultórico; también ha cambiado su atuendo. Ahora tiene identidad propia, un paso único que acrecienta el patrimonio de nuestra Semana Santa y que sobre todo, nos ha enseñado a los miembros de esta Hermandad que presido, que hay que ceder con humildad, hasta cuando no se comprende el porqué.
Nunca pude imaginar los acontecimientos que me ha tocado vivir a título personal desde ese día. Durante todos estos años, han pasado momentos buenos y momentos malos; de todos ellos he aprendido, pero sobre todo, que con humildad y honestidad en esta vida todo se acaba consiguiendo. Atrás han quedado las bendiciones de la Virgen. La primera fue el 13 de junio del año 1999 en la hoy llamada Basílica Ntra. Sra. del Socorro, bajo el nombre de Nuestra Señora de la Amargura; y con el que procesionó durante los dos años siguientes en nuestra Semana Santa. Aún a día de hoy sigo sin entender el porqué se tuvo que llevar a cabo la segunda bendición, pero esa era la condición indispensable que tenía que darse para que la imagen de la Virgen pudiera volver a participar en nuestra Semana Santa.
El día 2 de abril del año 2006, y en la parroquia de El Buen Pastor, se volvió a bendecir la imagen de la Virgen y que desde ese mismo día pasó a llamarse Mª Stma. de la Humildad; y junto a ella, la bendición también de la imagen que representa la figura del Redentor bajo la advocación del Santísimo Cristo del Perdón.
Desde aquel ya lejano Viernes Santo de 2001 trabajé junto a un grupo de gente para la fundación de la Hermandad; y tras la nueva bendición, se consiguió el 11 de julio de 2006 el que nuestra Hermandad fuera fundada al ser aprobada para incorporarse a la Semana Santa de Aspe.
El Miércoles Santo de 2007, 4 de abril, la Virgen volvía a estar en la Plaza Mayor, junto a la puerta de la Basílica, como si no hubiera pasado el tiempo para ella, aunque tuviera otra advocación y, esta vez su propia Hermandad. Sin embargo, aunque parecía un día de regreso, lo era de despedida. Despedida porque era la última vez que nuestra Semana Santa la veía así. En 2008 se sumó la imagen del Santísimo Cristo de la Bondad, y este año se incorpora la de San Juan Evangelista para finalizar su conjunto escultórico; también ha cambiado su atuendo. Ahora tiene identidad propia, un paso único que acrecienta el patrimonio de nuestra Semana Santa y que sobre todo, nos ha enseñado a los miembros de esta Hermandad que presido, que hay que ceder con humildad, hasta cuando no se comprende el porqué.
Luís Sánchez Prieto.
Hermandad del Stmo. Cristo del Perdón y Mª Stma. de la Humildad.
Hermandad del Stmo. Cristo del Perdón y Mª Stma. de la Humildad.
